Cuidar nuestro corazón

Según la OMS, las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en todo el mundo. Una dieta desequilibrada,  vida sedentaria o el consumo excesivo de alcohol y tabaco son factores de riesgo para la salud de nuestro corazón.

Para prevenir las enfermedades cardiovasculares, o para evitar nuevas crisis en caso de pacientes infartados,  cardiólogos como el doctor Freire, del hospital Centro Médico El Carmen, recomiendan la dieta mediterránea y actividad física. “Son buenos los  ejercicios de tipo aeróbico (caminar, correr, nadar, bicicleta…), siempre adaptando la intensidad a la edad y el estado físico de cada persona”, indica el doctor Freire.

Hoy vamos a centrarnos en la dieta mediterránea, ya de por sí deliciosa, y que además apetece más con la llegada de la primavera.

Se calcula que el consumo de la dieta mediterránea reduce un 30% el riesgo de enfermedad cardiovascular y  hasta un 70% las probabilidades de volver a padecer una patología cardiovascular. Por algo, la dieta mediterránea ha sido calificada como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Qué es la dieta mediterránea

La dieta mediterránea consiste principalmente en el consumo regular de:

• Frutas.
• Verduras.
• Legumbres.
• Frutos secos.
• Pan.
• Cereales, especialmente los que contienen trigo.
• Productos lácteos, principalmente desnatados.
• Aceite de oliva.
• Pescados.
• Carnes de ave.
• Vino y cerveza, en cantidades moderadas. 

En general, “una dieta en la que se potencie el consumo de frutas, verduras, pescado y se disminuyan las grasas de origen animal (especialmente las de la carne roja), contribuye a la reducción de los niveles de colesterol, que es uno de los factores de riesgo para la enfermedad cardiovascular”, señala el doctor Freire.

Además, la dieta mediterránea supone un buen aporte de ácido graso Omega 3, que ayuda a reducir los triglicéridos y las partículas de colesterol LDL, el conocido como “colesterol malo” que provoca arteroesclerosis. Podemos encontrar Omega 3 en el pescado azul (sardinas, anchoa, atún), el salmón, los frutos secos, la lechuga o las fresas. 

Más de un 46% de los españoles sufren exceso de colesterol y 28.000 personas mueren al año por causas asociadas a la obesidad, según un estudio de la Sociedad Española de Cardiología. Se cree que más de un 90% de los casos de infarto se podrían evitar con ejercicio y una dieta saludable así que ahora que llega el buen tiempo no hay excusa para empezar a cuidar nuestro corazón.